Consejo directivo Fundador (Enero 2007 a Junio 2008 )
Carlos Arismendi Gukowsky (Chile)
Hola,
mi nombre es Carlos y me presenta el observador que habita
en mí, soy un ser como muchos, con fecha de caducidad al
nacer, agradecido de la divinidad por permitirme respirar
cada día y por las oportunidades que me brinda para poder
ser mejor en este pasar y así estar mejor preparado para
servir desde la humildad a los demás. Me hace feliz
compartir espacios de conversación y crecimiento con el
resto de mis compañeros de existencia y poder así ser uno
con todos y la realidad toda, una conmigo.
Me hace
feliz poder orientar, guiar al que lo necesita, aprender de
los demás, lograr momentos de paz interior y plenitud,
siempre estar conciente, despierto, en actitud de apertura,
para lograr que mi observador se armonice y logre así
empatía con el entorno, poder construir realidades de
crecimiento en forma conjunta, poder descubrir a los ojos
del otro que mucha cosas que nos acontecen son
interpretativas y que basta cambiar el discurso que tengamos
de ellas para cambiar radicalmente nuestra actitud frente a
la vida, que el lenguaje genera realidad y no es inocente,
que habitamos mundos virtuales, que nos podemos re-construir
y re-diseñar cuantas veces lo necesitemos. Fascinante. Soy
un convencido que en la vida hay que darse oportunidades,
hay que ser curioso, desordenar, abandonar la zona de
confort, declarar quiebres, dejar la seguridad de la costa e
internarse en el vasto océano sobre la barca llamada
“crisis”, estos viajes bien navegados, son inagotables
fuentes de creatividad, de crecimiento, de innovación, de
redescubrimiento, esto nos permite enfrentar con mayor
madurez nuestro devenir, siempre respetando al otro y
re-conociéndonos protagonistas y no víctimas de las
circunstancias.
Es mi deseo que quienes han elegido
dentro de su libertad compartir destellos de su vida
conmigo, lo estén pasando bien, me encanta sembrar semillas
de amor en el otro, para así poder cultivar vidas más
plenas, más felices, con mayor bienestar, aceptación y
realización. Deseo que las personas sufran menos, que sepan
que tienen derecho a equivocarse, que la vida son solo
lecciones, pero que debemos aprender de los errores. Que
amen sin medidas y que mantengan a su ego amarrado con
fuertes cadenas y que hagan del buen respirar el combustible
vital para generar energía y luz para alumbrar a otros seres
que caminan solitarios por la oscuridad.
He trabajado
muchos años en tecnología, soy un agradecido de esta
distinción en mi vida, me ha permitido arribar a este bello
puerto llamado Coaching Ontológico, jamás había sentido este
entusiasmo y esta llama interior que esta disciplina ha
encendido en mí. No ceso de leer, de escribir, de aprender,
de investigar, de disfrutar y de sorprenderme de cuanta
gente maravillosa se ha cruzado en mi camino con esta
vocación de servicio por los demás. Con esta experiencia
interior reafirmo que el tiempo no es lineal, ni secuencial
como nuestro hemisferio izquierdo racional lo promueve,
cuando te cruzas y conectas con tu pasión el tiempo no
existe, me han sucedido tantas cosas bellas este último
tiempo, se me han presentado tantas oportunidades de
aprendizaje, de crecimiento, que no ceso de sorprenderme, la
vida es un hermoso misterio.
Ahora estoy con
bastante tranquilidad y calma disfrutando el acercamiento a
esta disciplina, estoy alineando mis actos con mi voz y mi
llamado interior, con aquello que me brinda satisfacción y
alegría, lo estoy haciendo con mucha calma, dejándome
llevar, no deseo forzar nada, porque cuando te cruzas con lo
tuyo, todo viene a ti y así lo he vivenciado.
Deseo
que la divinidad me permita, poder orientar e iluminar a
otros seres circunstanciales como Yo, a alinear sus actos
con sus sueños, con sus pasiones, con aquello que nos hace
seres de creatividad y energía inagotables, seres vivos de
verdad.
Recuerden, seamos eternos aprendices,
volvamos a tener la mirada, la curiosidad y la generosidad
de un niño, vivimos en mundos interpretativos, somos seres
lingüísticos y esta en nosotros darnos una nueva oportunidad
para soñar. Por favor “No renuncien a sus sueños”.
.
PABLO BUOL (Argentina)
Hola,
estimado/a lector/a ¿cómo estás? ¿cómo te trata la vida? y…
¿cómo estás tratando tú a la vida?
Sobre mí te cuento
que soy argentino, nacido el 2 de octubre de 1957. Tengo 2
hijos: un varón de 10 años y una “niña” de 22 (esto a
principios de este año 2007).
Trabajé durante 20 años como consultor informático en distintas empresas, mientras que, por una inquietud personal, desarrollaba mi "hobby": el estudio de la filosofía, psicología y religiones; en búsqueda de una verdad más profunda, del sentido de la vida, del por qué de tanto sufrimiento...
Hasta que hace unos 7 años me encontré con el Coaching Ontológico y me metí de lleno en esta nueva profesión (arte, oficio y disciplina). En ella integro mucho de lo que aprendí como consultor de empresas y mucho de lo que aprendí en mis propias búsquedas y, sobre todo, viviendo...
Para complementar mi formación he realizado diversos cursos de Negociación Profesional, Diagnóstico de la Empresa, Estrategia e información para la toma de decisiones, Liderazgo, Comunicación, y otros.
Admiro y comparto la mirada de Humberto Maturana sobre el ser humano y sus relaciones. Creo que es a partir de la legitimación de uno mismo y del otro, y de la co-inspiración, que podremos construir organizaciones y sociedades más dignas y efectivas, y un mejor futuro para nosotros y nuestros hijos.
Estoy realmente feliz de compartir este espacio, con el que he soñado estos años, y espero que podamos crear juntos un lugar de encuentro y desarrollo, con respeto, aprendiendo en bien-estar.
Te dejo, de regalo, una de mis frases preferidas:
“No
hay un camino hacia la paz.
La paz es el camino.”
Mahatma Gandhi
LAURA GUADALUPE ROLON GREGORIO (Paraguay)
Mi
nombre es Laura Guadalupe y mi presentación tendrá una base
un poco biológica pues me he disciplinado para la Medicina,
específicamente en Anatomía Patológica. Y quiero comenzar de
este modo, porque me gustaría decirles cómo y por qué veo
tan importante esta disciplina emergente y cómo me gusta
compararla con el diálogo continuo que permite que las
células se comuniquen efectivamente entre sí para beneficio
de nuestro cuerpo y cómo, las distinciones que propone esta
disciplina basada en el lenguaje, la corporalidad y las
emociones, hace que funcionemos cada vez mejor como personas
individualmente y en sociedad.
Les invito de esta forma a
viajar un poco por el cuerpo humano, para compartir desde
mis inicios en el Coaching ontológico, los cambios en mi
esqueleto interno mental, que me permiten adoptar hoy
distintas formas para moverme y avanzar por la vida,
tratando de ser una candela para mí misma y para los demás,
no solamente desde mi área diagnosticando enfermedades.
Resulta que el ciclo de una célula comprende dos períodos:
la división celular y el período de reposo hasta la próxima
división y es aquí, en este período de reposo que me paro a
observar, cómo los seres humanos muchas veces nos quedamos
en esta instancia, dejando que la vida misma pase sin
energías para evolucionar y poder iluminar el mundo. Lo
comparo con la zona de confort que nos permite vivir
cómodos, sin demasiados cuestionamientos y sin cambios de
hábitos. La diferencia está en que las células “salen” de
ese período de reposo y a nosotros muchas veces nos gusta
quedarnos allí.
Hace veinte años comencé enseñando la
estructura celular del cuerpo humano, con toda la pasión y
el entusiasmo propio de esa edad, porque el hecho de
transferir conocimientos para asegurar la interpretación del
funcionamiento de las células siempre me apasionó y fui
avanzando y pasaron los años y tuve el privilegio de conocer
a mucha gente. La enorme cantidad de horas que pasaba en los
hospitales donde me especialicé, me sirvieron para aprender
cada vez más acerca de las enfermedades y también me
ayudaron a reflexionar desde una perspectiva diferente,
sobre la mente humana y las enfermedades que yo no podía ver
con el microscopio, que es mi instrumento de trabajo.
Y
fue así que comencé a cambiar y mi observador interno hizo
un salto hacia delante. Al sentir los problemas
institucionales en donde yo trabajaba, veía que en una gran
mayoría de ellos tenían las mismas causas: El diálogo y la
escucha efectiva, la distinción de transparencia, la de
quiebre, la del lenguaje reactivo y otras …todas
distinciones del Coaching ontológico.
En sus raíces
occidentales y orientales, la educación superior era aquella
que indagaba sobre los fundamentos de todas las cosas y que
preparaba individuos para la sabiduría y la felicidad. Y a
decir de Pérez Lindo hoy, “la abundancia de la información
no ha hecho más que acentuar la fragmentación de saberes y
la ignorancia sobre el significado cultural de éstos”.
Coincido plenamente con él y pienso, que eso es lo que nos
coloca cómodamente en el “período de reposo”, citado con el
ejemplo de la célula, que muchas veces, se extiende toda la
vida.
Terminamos la facultad y pensamos que ya sabemos
todo, nos especializamos en un área o tal vez en más de una,
pero nos acomodamos allí y trabajamos en eso, y nos va bien
y avanzamos y nos va mejor, somos “muy profesionales” y
empezamos a hacernos conocidos...nos invitan a congresos,
escribimos artículos científicos, participamos en nuestra
sociedad y hasta llegamos a hacernos famosos en el mundo.
Somos expertos en lo que trabajamos, pero y un poco más
allá?
Qué pasa cuándo tenemos problemas en la familia,
en la empresa donde trabajamos, en la clase con los alumnos,
con nuestros compañeros de trabajo, con clientes o pacientes
que se quejan o no quedan del todo satisfechos por el trato
que le damos? Eso no lo aprendimos, no es de nuestra
especialidad.
Al examinar mi historia puedo ver
claramente el observador que soy hoy, gracias a los
conocimientos médicos acumulados, a las experiencias
pasadas, a las relaciones entabladas con diversidad de
gente, con alumnos en el aula, con profesores de Medicina,
con directivos médicos y administrativos. Y muchas veces me
viene a la mente un fragmento del tango de Santos
Discépolo:”Todo es igual, nada es mejor, lo mismo un burro
que un gran profesor”… y veo que la gente hoy más que nunca,
rinde culto a la mentira y que “la vida es un juego de ganar
o perder”.
Y por todo esto, comencé la búsqueda para ver
cómo podía aportar una luz a esta “economía del pillaje y de
la especulación” (linda frase de decir de Pérez Lindo) y
hacer ver que sin la inteligencia, no existe progreso para
poder construir con bases sólidas, un nuevo hábitat de
personas civilizadas y aquí aparece Edmund Burke diciendo:
“Lo único que se necesita para que triunfe el mal, es que
los hombres buenos no hagan nada”. Y ahí aparezco yo,
tratando de seguir aprendiendo y aplicando en mi vida y en
la vida de los demás, las valiosas distinciones del coaching
ontológico.
Hace unos cinco años, comencé a participar de
eventos sobre Evaluación del aprendizaje y sus políticas
para la acreditación de Facultades de Medicina... Un
verdadero reto, un gran propósito, un proyecto
extraordinario, que une a los EEUU, a la Comunidad Europea,
al MERCOSUR Educativo, a la Red Iberoamericana de
Acreditación y Evaluación.
Y nuevamente conocí mucha
gente y organizaciones con distintos paradigmas y una vez
más, observé gente insatisfecha con su trabajo,
instituciones incapaces de crecer aprovechando el talento,
la creatividad y todo el potencial de su gente y
profesionales con “inteligencia mental”, con incapacidad de
ver todas las dimensiones de los seres humanos: cuerpo,
mente, corazón y espíritu.
Y seguí participando en cursos
sobre calidad personal e interpersonal, comunicación e
inteligencia emocional, administración de conflictos,
planificación educativa, liderazgo, formación integral y
gerenciamiento en salud, entre otros y creo que estoy
encontrando “mi voz”, tratando de compartir los
conocimientos médicos mediante inteligencia mental y las
distinciones de coaching ontológico mediante: el lenguaje,
la corporalidad y las emociones.
Decía Richard Dawkins
que “los genes al igual que los diamantes, son para siempre”
y creo que si encontramos nuestra voz y podemos inspirar a
los demás para que encuentren su voz dejaremos un legado
para siempre y estaremos trabajando para que no triunfe el
mal en el mundo. Estaremos unidos en un proyecto
extraordinario, donde juntos romperemos los límites y nos
expandiremos en todas las direcciones, para encontrarnos en
un mundo nuevo, grande y maravilloso, que podremos legar a
nuestros hijos.
Viví un incidente concreto y fatal en mi
vida hace un año, que me llevó más aún hacia esta dirección.
Y tenía dos caminos divergentes: o entregarme y caer en una
profunda depresión o aprender a crecer desde la herida. El
coaching ontológico me insufló vida y me permitió mejorar mi
esqueleto interno, como el de las células, para adoptar una
visión diferente de mi vida personal, profesional y social,
que hoy me permite moverme de otro modo y protegerme de las
debilidades de los demás y de mis propias debilidades y más
que nunca comprendo que “cuando viajamos por la vida, es la
posición del alma, la que decide su meta, no la calma ni la
lucha” como dice Ella Wheeler
Y de eso se trata, de
nuestro constante crecimiento, de nuestra facultad para
ampliar las respuestas, de aprender, de contribuir, de
evolucionar para que todo a nuestro alrededor evolucione y
de alejarnos de nuestras comodidades, del “período de
reposo”, para no volver a sentirnos agotados, anquilosados,
desvalorizados, frustrados, desanimados, miedosos,
solitarios, aburridos, incapaces, enfermos. Para pasar a la
acción y esforzarnos por cumplir nuestro deber, con
inteligencia mental, física, emocional y espiritual. Y saber
lo que estudiamos y tratar de ser expertos en eso, pero
aprender además a tener una visión más profunda de las
cosas. “Saber, aprender y hacer…porque saber y no hacer, en
realidad es no saber y aprender y no practicar, no es
aprender”.
Somos nuestra propia elección, pues después de
la vida misma, la facultad de elegir es nuestro mayor don.
Y con estas distinciones aprendemos a vivir, a amar, a
aprender y a dejar un legado y podemos inspirar a otros para
que de esa misma manera cambiemos este mundo y no optaremos
por derrumbarnos y ceder, porque tendremos los conocimientos
y el esqueleto interno, para movernos efectivamente como las
células, para salir adelante en cualquier situación.
Podremos ver que la libertad se expande, que el crecimiento
se acelera y que la alegría se hace más profunda y verdadera
y seremos más grandes cada día, ejercitando la musculatura
espiritual.
Nos veremos a nosotros mismos y veremos a la
gente, a través de la lente de su potencial y de sus mejores
actos y dejaremos de mirar la vida con miopía, para pasar a
tener una imagen óptica óptima, trascendiendo nuestra vida y
creando un espíritu magnífico en los demás.
El
desconocimiento o las falsas apreciaciones acerca de esta
disciplina, muchas veces mal transmitido por el saber
popular, atentan contra la posibilidad de aprender estas
distinciones y puede anular oportunidades ciertas de
crecimiento y triunfo. Hoy, sacamos la cabeza a este
escenario virtual, que nos presenta al mundo, para
constituir así la Federación Latinoamericana de
Profesionales de Coaching Ontológico en un espacio de
aprendizaje y crecimiento personal, para inspirar a los
demás a encontrar su voz, para transferir poco a poco esta
revolución de la ontología del lenguaje, a cada rincón de
las personas.
Me gusta seguir con la comparación de la
complejidad de la célula que nos habita a todos y a cada uno
de nosotros. El diálogo continuo permite que las células se
comuniquen entre sí y coordinen su conducta para beneficio
del organismo. Es este comportamiento social de cada célula,
lo que asegura la ejecución de una determinada acción.
Existen mecanismos íntimos muy complejos que llevan a una
célula, a salirse de este sistema ordenado y a hacerse
maligna.
Lo mismo ocurre con nosotros. Si crecemos llenos
de cariño y apoyo, con una cultura de diálogo efectivo
continuo actuaremos permanentemente con un fin beneficioso y
tendremos el hábito de afirmar a la gente. Sentiremos
entusiasmo, que es la mejor forma de crear el futuro.
Eliminando los cinco cánceres metastáticos que ya nombraba
S. Covey hace tiempo y que son “criticar, quejarse,
comparar, competir y enfrentarse”, estaremos limpiando el
mundo de relaciones tóxicas, de metástasis de células
cancerosas en las relaciones y en la cultura, para
convertirnos en una luz y no en juez.
Construiremos
relaciones con actos regulares de amabilidad, consideración,
valoración y servicio, al igual que las células, siendo luz
y energía para un mismo fin.
El coaching ontológico no
ofrece posiones mágicas para aprender a controlar las
situaciones, pero con él aprendemos hábitos sanos, que
desencadenan buenas relaciones en todas las esferas.
Para
aquellos que prefieren no afrontar el tema o eligen no
informase en profundidad, este espacio que lo pueden
recorrer a solas, les dará una visión diferente y les
recordará que todos estamos constituidos por células y que
con esfuerzo y conocimientos, podemos trabajar igual que
ellas.
Es un camino largo, pero aquí estamos para ser una
luz en el mundo.
VICTOR M. GUTIERREZ TORRES (México)
Hace
muchos años inicie mi exploración por diferentes teorías
filosóficas que exploraban desde muy variados puntos de
vista las dimensiones de la naturaleza humana, así como sus
dimensiones divinas.
Fui profundamente afortunado y
bendecido al contar con los escenarios familiares
pertinentes para esta exploración, es decir, tengo una
familia extraordinaria. Me siento profundamente emocionado
cada vez que estoy enfrente de otro ser humano que al igual
que yo, cree en la posibilidad de un mundo pleno en el amor,
un mundo de retos y nuevos descubrimientos humanos, un mundo
en donde las dimensiones de la mente se infiltren en el
pensamiento social de tal manera que la felicidad, el amor y
la libertad sean realidades ulteriormente posibles.
Desde hace muchos años he encontrado en el montañismo un
templo extraordinario de encuentro con mi verdadera
naturaleza divina, en donde el viento me ha susurrado cosas
que sigo aprendiendo a descifrar, o mas bien a pronunciar.
Igualmente en el senderismo y la escalada en roca pude tocar
mis miedos y disfrute el conocerlos al igual que el
soltarlos.
Disfruté también el ser acogido por la
naturaleza, que con su silencio místico me enseñaba que era
mucho más que lo que pensaba que era yo mismo.
Fui un
ser amado por la divinidad pues me acerco a una madre que a
pesar de sus modelos mentales tradicionales y sus propios
miedos me introdujo a diferentes enseñanzas orientales que
me permitieron saber que la libertad de soñar y experimentar
requiere de un entrenamiento mental, de un reconocer quien
verdaderamente soy, y que ni importaba mi historia de vida,
las limitaciones materiales o emocionales en ese momento
presentes, y que mas allá de esa “realidad” la felicidad y
el amor eran posibilidades alcanzables.
Ahora sigo
estudiando diversas maneras de pensar, disfruto mucho estar
en presencia de enseñanzas que superan al dogma y la moral,
me encanta conocer modelos mentales distintos al mío, pues
me permiten retar mis dogmas conocidos y desconocidos, para
transformarlos en oportunidades de amor, respeto y libertad.
Soy ahora un practicante budista y este sistema de vivir ha
venido a redondear varios aspectos de mi vida, pero sobre
todo un nuevo sentido al servir a otros, a ser compasivo de
manera activa y no de manera pasiva.
He soñado muchas
veces con la posibilidad de la transformación social con
repercusiones ambientales significativas, he soñado con un
mundo en donde el respeto a todos los seres sea
ulteriormente posible, en donde la vida sea respetada y
admirada en todas sus manifestaciones, una vida en donde las
fronteras sean superadas, en donde las religiones se
respeten unas a otras, en donde seamos libres de las
ataduras del dogma y los moralismos convencionales, y es por
ello que he querido compartir esta visión con otras personas
para nutrirnos mutuamente de infinitas posibilidades y
maneras de sentir, vivir y convivir.
Me he movilizado
profesionalmente en espacios empresariales llevando a ellas
propuestas que incluyen el sentir y pensar humano como
plataforma de cambios organizacionales, una tarea que no ha
sido muy comercial o de fácil venta, pero que me ha
permitido llenar mi vida de sentido y satisfacciones, y a la
vez de enormes evidencias de que el servir vale la pena.
Curiosamente estudié ciencias de la comunicación con la
idea de poder superar mis dificultades para comunicarme con
los demás, y honestamente no fue en la universidad en donde
encontré esta transformación, fue más bien en una empresa
internacional dedicada al desarrollo de la comunicación
ontológica llamada “Landmark Education” en la cual acabe
trabajando y más adelante siendo instructor, fue ahí en 1990
donde inicié formalmente este viaje de la transformación
humana.
Desde ese año mi concentración estuvo puesta
en el deseo de poder hacer de esta ilusión mi manera de
vivir y sobrevivir. Transite por diferentes espacios
laborales que fueron desde ser coordinador del área de
pedagogía para un centro penitenciario en Puebla en donde
aprendí sobre el valor de una promesa, sobre el dolor y
sufrimiento humano, vi como las familias se diluían y como
las ilusiones se ahogaban; pero también me enseñaron a
creer, me enseñaron el valor de la amistad y el milagro de
la libertad de decidir tan mal usada en general.
Fui
también guía de montaña para “Saint Mary´s University of
Minessotta”, con quienes tuve oportunidad de trabajar por
cerca de 2 años. También con ellos tuve la enorme fortuna de
ser invitado a Minessotta a dar un curso de Kundalini Yoga
con lo cual conocí enormes maestros espirituales.
Al
terminar mi etapa de trabajo con esta universidad entre al
mundo de las ventas dentro de la industria farmacéutica;
comencé trabajando para Smithkline Beecham y concluí mi
etapa dentro de la industria con Merck Sharp & Dohme. En
ambas empresas y debido a mi pujante inquietud por
desempeñarme dentro de los espacios de entrenamiento y
desarrollo, tuve oportunidad de colaborar dentro de los
espacios de entrenamiento para algunos de los equipos de
ventas de estas empresas.
Finalmente me encontré de
frente ante la oportunidad de hacer de mi sentido de vida
una oportunidad para vivir también, entonces me integré al
equipo de Reingeniería Humana en donde la aventura comenzó,
aprendí acerca de la amistad en el trabajo, acerca del estar
juntos aún en momentos difíciles. Tiempo después recibí una
invitación para colaborar en otra consultoría liderada por
uno de mis maestros en el arte de desarrollo organizacional
en su empresa llamada Aprendizaje Global.
Finalmente
y al lado de los sueños compartidos con un amigo zarpamos en
el barco llamado Desarrollo Holístico, este ha sido hasta
ahora el espacio en donde los sueños de la transformación
humana han ido cobrando vida, en donde los espacios de
exploración mental se han ido construyendo paso a paso,
pieza por pieza hacia la posibilidad de servir a otros por
medio de la incorporación de diferentes metodologías y
corrientes de pensamiento, hasta llegar finalmente a un
nuevo encuentro con el ser humano, este encuentro esta
citado bajo el nombre de la “Federación Latinoamericana de
Coaching Ontológico”.
He encontrado muchos
psiconautas en este sendero, y espero que muy pronto todos
nos encontremos en algún espacio para transformar nuestro
pensar a favor de nosotros mismos y todos los que nos
rodean.
MARIA FRANCIA UTARD (Costa Rica)
Me
gustaría iniciar mi presentación con diferentes miradas:
Soy taurina, nacida el día del trabajo; tierra es mi elemento, con los pies en la tierra y perseverante en lo que me propongo.
Soy del 46 y de acuerdo al calendario chino soy perro, amiga fiel y compañera.
En el eneagrama son número 2, que significa estar al servicio de los demás.
En el calendario maya soy noche espectral azul: donde libero, divulgo, comunico, disuelvo estructuras.
Sin ahondar muchos en todas estas características, siento que reflejan lo que soy, lo que vivo, mi pasión por lo que hago y como lo hago.
Soy argentina de nacimiento, francesa por filiación, chilena por matrimonio, por mi primer marido soy media brasilera, por la exhuberancia de la naturaleza, sus flores y sus playas soy tica (costarricense), me siento formando parte del mundo y no de un lugar especifico…
En el devenir de la vida estuve en varios lugares y haciendo varias cosas…. siempre interesada en las personas, lo que les pasa, como hacen las cosas, cuales son los procesos que utilizan para lograr sus propósitos, siempre enfocada en las personas.
En ese pensar estudie gestión de recursos humanos en Costa Rica, antes había estudiado Historia en Francia. Sin embargo, a poco andar, percibí que me faltaba algo muy importante, que era la comunicación entre las personas. Había estudiado la importancia del mensaje “claro” entre el emisor y el receptor sin embargo eso no funcionaba, había “ruido” en esos mensajes. Observaba que las personas no decían lo que pensaban o sentían y me preguntaba ¿que pasa que no se entienden, que pasa que hay tanta incomunicación entre las personas? Ante tanta incomunicación decidí hacer en México el curso de coaching ontológico con Rafael Echeverría (mi gran maestro) y Julio Olalla, después me seguí perfeccionando con Marcelo Krynski y posteriormente profundice mis conocimientos con Humberto Maturana en la matriz biológica de la existencia humana.
En ese caminar aprendí sobre la comunicación, la coherencia que existe entre el lenguaje, las emociones, la corporalidad y la intuición o ese algo más que no sabemos de donde viene. Empecé a observar y a entender como las personas se relacionan, se comunican; empecé a observar mas detenidamente el dolor de lo no dicho, sus actitudes y la relación entre lo que pueden o no pueden hacer. Y…. empecé a facilitar diferentes procesos del comunicar humano.
Sin embargo, en ese observar seguía sin entender como las personas se comunican sin siquiera haber hablado, escrito un mail o llamado por teléfono; o también, porque tomaban decisiones “de la guata” aunque la información recomendase lo contrario. Eso me llevo a trabajar con energía e incursionar en diferentes técnicas hasta encontrar el balancing, la que me apasiona por sus resultados en las personas.
En ese camino, que se hace al andar, creé mi consultora donde, desde la mirada ontológica, me dedico a los recursos humanos, al desarrollo organizacional, y especialmente a la comunicación; con CrearContextos formé coachs ontológicos y también formo profesionales en emfbalancing techinque. Doy clases en la universidad a nivel de maestría: conversaciones ontológicas, calidad y emprendimiento. Además dedico mi tiempo a la fotografía; a caminar por la naturaleza; me encantan las flores, el mar; me gusta la soledad y también compartir la amistad. Me gusta el verde, color de esperanza y el morado o indigo de integración.
Como ciudadana del mundo ahora estoy en Costa Rica, acompañando a mi esposo; tengo un hijo de 28 años que regresa a Chile, después de dos años de dar la vuelta al mundo.
En este nuevo proyecto de la Federación de Coachs Ontológicos, como dice la canción “caminante no hay camino, se hace camino al andar”, y en ese caminar me sumo “haciendo caminos, caminos sobre el mar” para que nuestra mirada crezca y se expanda a los diferentes confines del mundo.
En resumen esa soy yo, Maria Francia Utard.
SANDRA ROZO ZAPATA (Colombia)
Estudios:
Administradora
de Empresas (UCC) y Diseñadora Gráfica (UPB), con estudios
en Gerencia Social (U. Eafit), Legislación Financiera (U.
del Rosario) , Responsabilidad Social Empresarial,
Negociación de Conflictos, Estrategia, Formación de
Formadores (U. Pinar del Río de Cuba), con una Maestría en
Ciencias Políticas con Énfasis en Geopolítica (U. Eafit –
PT) y Coaching Ontológico (Cocrear Argentina). Estos
conocimientos han sido aplicados en el desarrollo de mi vida
laboral y profesional; con un alto enfoque comercial y
financiero, gran sensibilidad hacia los grupos de interés
(stakeholders) y habilidad para la toma de decisiones. Los
intereses profesionales actuales son dar aplicación al
conocimiento y experiencia adquiridos, en un entorno de
empresas del sector financiero y real, en el que
simultáneamente pueda hacer un manejo eficiente de recursos.
Socialmente interesada en poder aportar al desarrollo de la
comunidad laboro voluntariamente en Instituciones Sin Ánimo
de Lucro, contando con el respaldo de una familia amorosa y
unida.
Experiencia Profesional:
-
INVESTIGADORA & CONSULTORA
GENERACION DE MODELOS DE OPORTUNIDAD - TRANSFORMACION ORGANIZACIONAL Y DESARROLLO DE HABILIDADES DIRECTIVAS -
PRESIDENT & CEO. E-ICONEX INTERNATIONAL LTDA.
(DIC. 1 DE 2005 – A LA FECHA) -
PRESIDENT
INTERNATIONAL HEATH & BEAUTY SERVICES
(OCT. 17 DE 2006 – A LA FECHA) -
PRESIDENTE CORPORACION CONSCIENCIA GLOBAL
(DIC. 1 DE 2005 – A LA FECHA) -
VICEPRESIDENTE JUNTA DIRECTIVA FUNDACION AMIGOS
DE LA ALEGRIA
( ENERO 7 DE 1999 – A LA FECHA) -
VICEPRESIDENTE PLATAFORMA OPORTUNIDADES FONDO DE
GARANTIAS DE ANTIOQUIA S.A. -
MEDELLÍN
(JULIO 14 DE 1997 - NOV 21 2005) -
GERENTE
BANCO SUDAMERIS COLOMBIA - MEDELLÍN
SEPTIEMBRE 18 DE 1995 A JULIO 15 DE 1996